sábado, 2 de mayo de 2020

Sandino1

En México, se gesta un acontecimiento trascendental en la historia personal y posteriormente en la historia de nuestro país. A principios de 1926, surge el movimiento revolucionario en la Costa Atlántica de Nicaragua, encabezado por Beltrán Sandoval (Román, 1979, págs. 49, 50). Mientras compartía momentos con algunos amigos en un restaurante, un individuo ebrio le expresa a Sandino que todos los nicaragüenses son vendepatrias. Esta afirmación provoca que Sandino reflexione sobre sí mismo, atribuyendo la responsabilidad de tal calificativo al Tratado Chamorro Bryan.

A partir de ese momento, sin tener una idea clara en mente, Sandino abandona Cerro Azul, donde estaba trabajando, y se dirige a Tampico. Desde allí, embarca en el Vapor Méjico y, el 15 de mayo de ese año, desembarca en Veracruz. Luego, en tren, atraviesa Guatemala y El Salvador, llegando finalmente al puerto de Tempisque, Nicaragua, donde toma conciencia de las condiciones sociales y políticas (Romero, 1961, pág. 146).

Según la cronología preparada por el Dr. Sergio Ramírez, llega a Nicaragua el 1 de junio de 1926 (Ramírez Mercado, 1981, pág. LXIII). Al llegar a su país, decide trasladarse a su pueblo natal, pero un amigo le aconseja que no lo haga debido a la influencia de Dagoberto Rivas, alcalde conservador chamorrista. Dado el convulso estado del país, decide quedarse en León, donde se une a un grupo de obreros que se dirigían a las minas de San Albino. Allí, es contratado como guarda de almacén y observa el sistema de pago de la mina, que utiliza cupones en lugar de dinero efectivo. Durante este período, comienza a explicar a los obreros la necesidad de un nuevo gobierno preocupado por el pueblo, compartiendo ideas sobre cooperativas y denunciando la explotación (Román, 1979, pág. 49).

Sandino se involucra en la lucha contra los conservadores el 2 de noviembre de 1926, atacando Jícaro, Nueva Segovia, con 29 hombres contra 200 acuartelados de Chamorro, aunque no logran tomar la plaza. Posteriormente, viaja a la Costa Atlántica para entrevistarse con el Dr. Sacasa en busca de armas, probablemente entre el 23 y el 24 de noviembre. Durante su estancia de 40 días, recibe en secreto armamento de prostitutas. Su viaje de regreso con el cargamento de municiones y armas le lleva alrededor de un mes, regresando al Chipote el 2 de febrero de 1927.

El 16 de julio de 1927, Sandino y sus tropas atacan Ocotal, resultando en la muerte del Coronel Antonio Rufo Marín y alrededor de 300 personas, entre militares sandinistas y civiles, atacados por aviones norteamericanos.

La divisa de su ejército es la bandera roja y negra, originalmente de los ácratas libertarios europeos, pero adoptada por diversas corrientes sindicales y sociales en resistencia. "Patria y Libertad" es el lema oficial, derivado del "Tierra y Libertad" de los anarquistas y de Zapata. Para Sandino, "Patria" representa la figura que une a los estamentos nacionales y sociales (Bendaña, 2016).

En 1929, con la necesidad urgente de recolectar fondos y armamento para la guerra contra la Guardia Nacional y los Marines estadounidenses, Sandino viaja a México. Aunque se entrevista con el Presidente Portes Gil, este niega cualquier ayuda a la causa nacionalista. Sandino regresa a Nicaragua en mayo de 1929 y, el 10 de junio de 1930, informa sobre su viaje (Román, 1979, pág. 105, ss).

En los sucesos posteriores en el país, Sandino y sus generales enfrentan cruentas batallas en diversos lugares, llegando a un acuerdo con diferentes actores políticos. En la última reunión con el Presidente, Sandino, sin darse cuenta de que su verdugo le esperaba, acepta el encuentro, permitiendo que sea desaparecido y allanando el camino para la estocada final al Presidente Sacasa. Todo esto sucede con la aprobación del entonces representante de los intereses de Estados Unidos en Nicaragua, el embajador Arthur Bliss Lane.



Camión Ford, donde Sandino, Estrada y Umanzor fueron trasladados para ser asesinados. Según Nicolás López Maltés, en su libro Historia de la Guardia Nacional. 

Finalmente, el 21 de febrero de 1934, en las afueras de Managua, en un campo de aviación construido por los marinos estadounidenses, el General Augusto C. Sandino perdió la vida alrededor de las 11 de la noche, marcando una fatídica noche en la historia de nuestro país.

El asesinato de Sandino y sus lugartenientes parecía estar premeditado desde al menos un mes antes del trágico evento. Según se dice, se interceptó un mensaje dirigido al Presidente Juan Bautista Sacasa, supuestamente proveniente de Sandino, en el que expresaba su apoyo para desafiar la hegemonía de Somoza. Este mensaje, que en realidad podría haber sido una artimaña, fue utilizado como pretexto para justificar las acciones de la Embajada Americana y los intereses de Somoza. Como resultado, Sandino y sus colaboradores fueron traicionados y a
asesinados.  (Díaz Lacayo, 2002, pág. 140)

Respecto a este suceso, diversas versiones han surgido, cada una con sus propias hipótesis:

1. Como lo anunció la prensa, el General Sandino ingresó nuevamente a la capital a las 11:30 de la mañana en el trimotor de Laney, acompañado por el Ministro de Agricultura y Trabajo, Sofonías Salvatierra, el Diputado Simeón Rizo Gadea y miembros de su estado mayor, los generales Estrada, Umanzor y Sandino (Sócrates), así como el Coronel Ferreti. Este relato recoge el dato de su llegada a Managua para lo que sería su última entrevista con el Presidente Sacasa (Ramírez Mercado, 1981, págs. 531-532).

2. En la esquina opuesta al Campo de Marte, sobre la Avenida Roosevelt y frente al Cuartel del Hormiguero, había una gasolinera. En este lugar, un guardia armado detuvo a un taxista y a un testigo. Cerca de allí, se observó un grupo de personas que llevaban apresados al General Sandino, su padre don Gregorio, el Ministro Salvatierra y otras personas, según el relato del testigo (Rizo Gadea, 1997, págs. 207-208).

3. Descendiendo de la Loma, donde se encuentra la Casa Presidencial, hasta llegar al pie de la colina donde están las garitas del Campo de Marte, un pelotón de guardias detuvo un automóvil. Apuntando con ametralladoras, el jefe del pelotón ordenó a los ocupantes bajarse del vehículo. Todos entregaron sus pistolas, excepto Don Gregorio y el narrador, quienes no portaban armas en ese momento (Salvatierra, 2013, pág. 178 y ss).


Artículo del Diario La Prensa 21 de febrero de 1971.










Croquis del posible lugar del fusilamiento del Gral Sandino. 




El 21 de febrero de 1934, Anastasio Somoza García, en un acto que marcó uno de los capítulos más oscuros de la historia de Nicaragua, ordenó el asesinato del general Augusto C. Sandino. Este trágico suceso tuvo lugar durante una reunión donde se firmó un documento conocido como "el Pacto de Sangre". Sandino, junto con su hermano Sócrates, los generales Estrada y Umanzor, y un niño, fueron enterrados en los patios de la actual unidad policial Ajax Delgado. En 1944, los restos fueron exhumados y quemados en el lugar donde se ubicaba el restaurante Los Gauchos, en la Carretera a Masaya.


Somoza y sus cómplices en la muerte del Gral Sandino.


La noche del crimen, alrededor de las 10:00, después de una cena en el Palacio Presidencial, el general Sandino viajaba en un automóvil Chevrolet con otros acompañantes, incluyendo al ministro de Agricultura, Sofonías Salvatierra. Mientras descendían por la Avenida Central, fueron detenidos por un automóvil Ford simulando un desperfecto. En ese momento, un grupo militar liderado por el sargento Juan Emilio Canales, apodado "Cabuya", ordenó la detención de los ocupantes del Chevrolet.

La detención fue informada a Casa Presidencial por Maruca, hija del presidente Sacasa, quien regresó al enterarse del hecho. Simultáneamente, Somoza García había reunido a varios militares en su oficina, presentando un plan para eliminar a Sandino con el respaldo de Bliss Lane, ministro estadounidense. Los presentes acordaron el asesinato y firmaron un documento llamado "El Pacto de Sangre".

Capturado, Sandino solicitó hablar con Somoza García y el presidente Sacasa, pero sus peticiones fueron ignoradas. Somoza García ordenó su ejecución y, junto con los generales Estrada y Umanzor, fueron llevados al sitio conocido como "El Hormiguero". Los cuerpos fueron acribillados a balazos y golpeados antes de ser sepultados en una fosa común.

Somoza en los minutos posteriores al asesinato de Sandino y sus acompañantes, llegó a contemplar los cuerpos inertes, destrozados y profanados de sus víctimas. (Arellano, 2006, pág. 189)


Bliss Lane, el ministro estadounidense, desempeñó un papel destacado esa noche, visitando la casa de Salvatierra y acompañando a los detenidos a la sede diplomática estadounidense. Somoza García, con cinismo, anunció una investigación, pero el resultado fue la ocultación de los cuerpos.

El 3 de junio de 1934, en un banquete en el Club Social de Granada, baluarte del Conservatismo Somoza acepta sin miramientos la responsabilidad de los hechos: " LA MUERTE DE SANDINO ERA POR EL BIEN DEL PAÍS". (Arellano, 2006, págs. 26-27)


En 1944, ante la amenaza de su régimen dictatorial, Somoza García ordenó la exhumación de los restos y su quema en la Hacienda Santa Feliciana. Diversas versiones apuntan a la participación de diferentes individuos en este acto macabro. Las cenizas se esparcieron en el lugar donde se encontraba el restaurante Los Gauchos.

Este episodio marcó el fin trágico de la vida de Sandino y la complicidad entre Somoza García y fuerzas externas, dejando una herida profunda en la historia de Nicaragua.

Cronología de los principales eventos en los que estuvo directamente involucrado el Gral. Sandino. 
Bibliografía 

Arellano , J. (2006). Guerrillero de Nuestra América. Sociedad Bolivariana de Nicaragua.

Díaz Lacayo, A. (2002). Gobernantes de Nicaragua (1821-1979) . Aldila .

Ramirez Mercado, S. (1981). El Pensamiento Vivo de Sandino. Managua : Nueva Nicaragua.

Rizo Gadea, S. (1997). Nicaragua en mis recuerdos . Managua: Impresiones y Troqueles.

Salvatierra, S. (2013). Sandino o la tragedia de un pueblo. (3 ed.). Managua: Aldilà.



1 comentario:

  1. Qué bueno que has continuado añadiendo nuevos contenidos a este blog, siempre uno aprende cosas nuevas al leerlo.

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Muchas gracias por sus aportes.